Fisioterapia pediátrica

Fisioterapia en el cólico del lactante

¿Que es?

Según la Asociación Española de Pediatría (A.E.P.), el cólico del lactante es un cuadro de llantos prolongados, a veces inconsolables, que se inician alrededor de la segunda semana de vida, repitiéndose casi a diario o a diario, y que puede persistir hasta el tercer o cuarto mes. Suele sufrirlo 3 de cada 10 bebés, en los cuales el llanto que presentan suele producirse desde el atardecer hasta entrada la madrugada, y debe tener una duración de al menos 3 horas a lo largo del día

¿Cuales son las causas?

No se sabe muy bien la causa concreta aunque las mas frecuentes son:

  • Inmadurez del intestino, que hace que el peristaltismo no sea correcto.
  • Intolerancias alimentarías, como por ejemplo a la lactosa.
  • El estrés, ansiedad o nerviosismo de los padres también es un factor influyente

¿Cuales son sus síntomas?

El llanto, es lo que más preocupa a los padres, es un llanto inconsolable que aparece sobretodo a última

hora de la tarde y por la noche. Aunque también muchas veces a lo largo del día. Este llanto va acompañado de encogimiento de las piernas y enrojecimiento de la piel.

Además del dolor, los niños presentan estreñimiento, regurgitación u otros trastornos del aparato digestivo.

Generalmente mejoran con movimientos vibratorios o cogiendoles en brazos (en el coche, acunándolos….) suelen desaparecer a los 3 o 4 meses de vida aunque en ocasiones pueden durar un poco más.

¿Que se puede hacer en la consulta del fisioterapeuta?

Existen técnicas que mejoran el transito y por lo tanto el peristaltismo y como consecuencia disminuyen el dolor del bebe.

Entre los tratamientos más eficaces esta la fisioterapia, que usando técnicas osteopáticas normaliza el movimiento del aparato digestivo disminuyendo los cólicos. El tratamiento de fisioterapia se realiza en 2 o 3 sesiones de 45 minutos y en la mayoría de los casos se obtienen resultados visibles desde la primera sesión.

Este trabajo relaja y elastifica el intestino del bebe así como las fascias. Al desaparecer la tensión, el tránsito intestinal mejora y desaparecen las tensiones y las molestias que ocasionan.